Poca incidencia de cáncer cérvicouterino en la región del Balsas de Guerrero

Arturo Parra Ochoa
Acapulco, Gro., 15 de abril de 2009.- Mientras los municipios con mayor índice de casos detectados de cáncer mamario y cérvicouterino son Acapulco, Atoyac de Alvarez, Tecpan de Galeana y Coyuca de Catalán, el de menor incidencia es Mártir de Cuilapan, concretamente la comunidad de San Juan Totonzintla, según estudio realizado por investigadores de la UAG.
La encargada del área de proyectos de la Universidad Autónoma de Guerrero, Josefina Munguía, señaló que esta entidad está entre las siete con mayor incidencia en cáncer cervicouterino a nivel nacional, con el 27.9 por ciento, según cifras oficiales. El director del Instituto Estatal de Cancerología, Marco Antonio Terán Porcayo, reveló que cada año se detectan mil 800 nuevos casos de cáncer en el estado, siendo la principal causa de muerte en mujeres mayores de 25 años de edad.
Pero en una remota comunidad del municipio de Mártir de Cuilapan, San Juan Totonzintla, se presenta la más baja incidencia de cáncer cérvicouterino de la entidad, a pesar de que el 98 por ciento de las mujeres son analfabetas y casi no hablan español, reveló el estudio universitario. Josefina Munguía dijo que pese a su bajo nivel educativo, las mujeres de esa localidad aledaña al río Balsas, se hacen regularmente la prueba del Papanicolaou.
En esta comunidad, comenta Munguía, como las mujeres inician su vida sexual a muy temprana edad, son multíparas y los factores de riesgo de cáncer son altos, por ello se tomaron muestras a un número considerable de mujeres de entre 15 y 70 años de edad.
Pese a las referencias anteriores, y a que la mayoría es población migrante -otro factor que puede considerarse de riesgo-, se pudo comprobar que hay pocos casos de cáncer. La investigadora comentó que las familias migran completas, los esposos se van con sus esposas y sus hijos, lo que reduce la posibilidad de que mantengan relaciones extramatrimoniales e infecten a sus parejas con el virus del Papiloma Humano, asociado al cáncer cérvicouterino.
Agregó que aunque la Secretaría de Salud estatal aplica la prueba del Papanicolaou en las comunidades indígenas de Guerrero, aún existen casos en los que la enfermedad no se detecta a tiempo, y ello, apuntó, puede ser por dos factores: o no se están tomando bien las muestras o los resultados no son interpretados correctamente.
En San Juan Totonzintla existe un centro de salud comunitario que es muy pequeñito y tiene deficiencias, pero aún así la preocupación de las mujeres de San Juan Totonzintla por su salud, rompe el mito de que las y los indígenas son más reacios a temas de salud reproductiva y menos participativos.