Jorge Balvanera
Chilpancingo, Gro., 01 de diciembre del 2025.- Diversas organizaciones sociales, exguerrilleros, amigos y familiares rindieron homenaje al comandante Lucio Cabañas Barrientos, fundador del Partido de los Pobres (PDLP), y a dos combatientes más, que junto con él murieron hace 51 años en el punto conocido como El Otatal, municipio de Tecpan de Galeana, en la Costa Grande de Guerrero.
Unas 100 personas llegaron al Otatal, donde el 2 de diciembre de 1974 cayó muerto Lucio Cabañas, así como los dos combatientes Lino Rosas Pérez y Esteban Mesino Martínez, que se presume fueron asesinados por el Ejército Mexicano, en tanto que un tercer guerrillero, Marcelo Serafín Juárez, fue desaparecido desde entonces.
Al hacer uso de la palabra, Tita Radilla, vicepresidenta de la AFADEM, y quien busca desde hace más de 50 años a su papá Rosendo Radilla, señaló: “yo reconozco que estos hombres no abandonaron al maestro (Lucio Cabañas); ellos estuvieron ahí hasta el último momento; Marcelo, casi un niño, hijo de doña Victoria “N”, que tiene otros hijos desaparecidos; tengo una fotografía de otra persona, que está rodeada por militares; tampoco sabemos si algunos más estuvieron, o fueron desaparecidos”.
Yo sí creo “que ellos son nuestros héroes; son gente consciente, congruente con sus luchas e ideales; y son un ejemplo, para quienes nos decimos luchadores, también sigamos por ese camino; dejando los vicios, los malos hábitos, y las cosas que ofenden a nuestro pueblo; me encuentro contenta y conmovida de estar en este lugar”.
Por su parte, Micaela Cabañas Ayala, hija del extinto guerrillero, recordó: “hace 51 años, 7 batallones del Ejército Mexicano rodearon este lugar, como si se tratara de una persona que dañara al pueblo, así se recordaba antes a Lucio; la historia nos ha dado la razón: Lucio no era un asesino, un traidor, o roba vacas; quizá lo hacía por necesidad, si alguna vez lo hizo; quizá su lucha, fue una ofensa para muchos, pero para el pueblo fue alguien se preocupó por las causas justas y luchó por ustedes y nosotros, para que tuviéramos mejores condiciones de vida”.
Afirmó que el ideario del Partido de los Pobres sigue vivo: “las adversidades del pueblo no han terminado; sigue habiendo necesidades, mientras los gobiernos abanderen una bandera que no les corresponde. Con este homenaje a los 51 años (de su muerte), se sigue recordando a los gobiernos de izquierda que ahora nos representan, que hubo alguien que luchó y que murió por esa patria, y ese beneficio democrático que hoy se vive”.
A 51 años “el gobierno no ha dado respuesta; no hay reparación del daño, ni tampoco quien responda con justicia hasta este momento; pero seguiremos recordando al maestro Lucio Cabañas”.
Con este homenaje en El Otatal, que conluye este martes, comenzaron las actividades a la memoria del líder guerrillero; ahí se colocó una ofrenda para él y sus compañeros de armas, también asesinados por el Ejército, Lino Rosas Pérez y Esteban Mesino Martínez; y se exigió la presentación con vida de Marcelo Serafin Juárez, detenido-desaparecido por el Ejército ese mismo día.
Antes, se hizo una concentración de activistas en la salida de la ciudad de Atoyac, en el punto conocido como la Y Griega; en el que participó el exguerrillero y ex comisionado de la Comisión de la Verdad, Nicomedes Fuentes, Micaela Cabañas, Diana Itzel Hernández, hija del luchador social asesinado Ranferi Hernández; la dirigente de la OCSS, Norma Mesino y su padre Hilario Mesino; la vicepresidenta de la Afadem, Tita Radilla; el exgobernador Rogelio Ortega; el activista Cuauhtémoc Contreras; así como un contingente de estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa.
Hubo indignación por el homenaje que llevó a cabo el gobierno de Evelyn Salgado Pineda al exgobernador Rubén Figueroa Figueroa, responsable de cientos de desapariciones forzadas.
Al llegar al Otatal, en medio del bosque, se colocó una ofrenda con flores, frutas y paliacates.
Los asistentes, se colocaron entre ramas, piedras y, el arroyo seco, en el que se presume, se atrincheró Cabañas Barrientos, y cayó en combate Lucio Cabañas, un 2 de diciembre de 1974.