Chilpancingo, Guerrero, 25 de junio de 2025.- Desde la tribuna del Congreso del Estado, la diputada María de Jesús Galeana Radilla hizo un llamado a las autoridades de los tres niveles de gobierno para atender con urgencia las condiciones de vulnerabilidad en el cauce del río Atoyac, particularmente a su paso por el municipio de Benito Juárez y comunidades vecinas de la región Costa Grande, donde —advirtió— existe un riesgo real de desbordamiento que podría afectar a decenas de familias.
Durante su intervención ante la Comisión Permanente, Galeana Radilla expresó su solidaridad con las comunidades de la Costa Chica y la Montaña que resultaron afectadas por el huracán Erick, fenómeno que tocó tierra en el litoral guerrerense causando fuertes lluvias y estragos en distintas localidades.
La legisladora destacó la labor preventiva y de respuesta por parte del gobierno federal y estatal, reconociendo que su oportuna coordinación evitó daños mayores. Sin embargo, subrayó que la situación en muchas zonas sigue siendo crítica, y que no se debe asumir una postura de complacencia tras el paso del meteoro.
“El pronóstico indicaba un posible impacto devastador en toda la zona costera. Afortunadamente, sus efectos fueron más localizados, pero eso no significa que debamos relajarnos. La naturaleza es impredecible y debemos estar preparados para lo que pueda venir”, alertó.
Uno de los puntos centrales de su discurso fue el deterioro de la infraestructura colocada para contener el cauce del río Atoyac, específicamente en el tramo que cruza por San Jerónimo y las comunidades de Hacienda de Cabañas, Arenal de Gómez, Las Tunas y Arenal del Paco.
Según explicó, desde el año pasado se cayó parte de la valla metálica que había sido colocada como protección, sin que hasta ahora se hayan iniciado labores de reparación, a pesar de los reportes comunitarios y las reiteradas solicitudes ciudadanas.
“Lo que está en juego es la vida y el patrimonio de familias que viven cerca del cauce. No podemos esperar a que ocurra una tragedia para actuar”, sentenció.
Galeana Radilla pidió que se canalicen recursos de forma inmediata para reforzar las medidas de prevención en esta zona de alto riesgo, y que las autoridades competentes —tanto federales como estatales y municipales— realicen recorridos técnicos, elaboren dictámenes y ejecuten acciones de mitigación antes de que aumente el caudal por nuevas precipitaciones.
“La reparación de esta infraestructura no puede seguir postergándose. Estamos hablando de zonas rurales con población vulnerable, que ya ha enfrentado años de abandono institucional”, subrayó.
Enfatizó que la cultura de la prevención debe colocarse como una prioridad permanente en la agenda pública del estado, y que la protección civil no debe ser entendida como un protocolo burocrático, sino como una herramienta viva que se fortalece con acciones concretas, participación comunitaria y voluntad política.
La diputada cerró su participación haciendo un llamado a la unidad: “Este es un momento para unir esfuerzos, demostrar verdadera solidaridad y compromiso con nuestro pueblo. La mejor forma de honrar nuestro deber como representantes populares es evitar tragedias que sí pueden prevenirse con responsabilidad y visión”.