Privilegios y altos ingresos mantienen a Ofelio Martínez aferrado al STAUAGro

*Corrientes políticas universitarias aseguran estar convencidos que el Comité Ejecutivo Central de este sindicato se ha convertido en un organismo parásito y subordinado al patrón.
Jorge Balvanera
Detrás de dos periodos consecutivos en el cargo de secretario general del Comité Ejecutivo Central del Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad Autónoma de Guerrero (STAUAG), existe en Ofelio Martínez Llanes, intereses mezquinos ajenos a los trabajadores sindicalizados que representa, una larga lista de privilegios, autos de lujo en comodato del gobierno del estado y altos ingresos que percibe mensualmente, explica el por qué se aferró irregularmente dos años más en el poder.
Recordemos que el pasado mes de septiembre, pese a las denuncias y críticas de violación a los estatutos jurídicos de este sindicato, el Consejo General de Representantes (CGR) avaló que los integrantes del Comité Ejecutivo Central del STAUAG al amparo de la pandemia, prorrogaran por dos años más su administración, Martínez Llanes, quien ya cumplió dos periodos de 4 años cada uno, vio en el distanciamiento social obligado por la pandemia de coronavirus, la oportunidad de eternizarse en su zona de confort y sumisión al patrón.
“Después de ocho años y haber pasado por una reelección, Ofelio Martínez, el pasado septiembre lejos de convocar a un Congreso de representantes de las escuelas para convocar a elecciones y elegir a un nuevo Comité Central Ejecutivo, sin embargo no se hizo y al amparo de la pandemia, violando estatutos y sesionando de manera virtual el CGR prorrogó dos años más el cargo de Ofelio Martínez, apoyado por algunas fuerzas políticas de la universidad”, dijo un trabajador universitario de este sindicato que se oponía a dicha prórroga, quien omitió su nombre por obvias razones.
Sostuvo que hubo una “línea” de coacción del voto a favor de la prórroga orquestada por Martínez Llanes y otros dirigentes que se han mantenido largos años en el poder, llenos de privilegios, jugosos viáticos, altos ingresos y 5 automóviles de lujo dados en comodato al STAUAG.
El Estatuto General del STAUAG, no establece que pueda darse al Comité Central Ejecutivo una prórroga de mandato sindical de manera virtual y después de haberse concluido un periodo de reelección, como es el caso de Ofelio Martínez, se violentó la legalidad y las normas que han regido por más de 50 años a este sindicato de trabajadores académicos.
Evidentemente hay una alineación de intereses entre el STAUAG y la rectoría de la Uagro, una misma visión y de estrategia política, la falta de democracia sindical afecta los intereses de los trabajadores que no se sienten representados por el indolente Martínez Llanes, tal es el caso del tema del descuento del Impuesto Sobre la Renta (ISR) a las prestaciones laborales contempladas en el contrato colectivo de trabajo, que hoy merman la economía de trabajadores y que lógicamente provocó movilizaciones de protestas de trabajadores Académicos, y el líder sindical Ofelio Martínez, en vez de apoyarlos, los acusó de politizar su postura ante el ISR.
Ante la falta de empatía del eterno secretario general del STAUAG y la indolencia para defender a sus representados del patrón, profesores de diversas preparatorias y de nivel superior de la máxima Casa de Estudios pertenecientes a la organización política, Transformación Universitaria Guerrerense (TUG), mostraron en su momento su total rechazo a la reelección del Comité Central Ejecutivo del STAUAG y se pronunciaron por la creación de un nuevo sindicato que no sea títere del rector en turno y que verdaderamente trabaje por defender los derechos y conquistas laborales de los trabajadores académicos.
Los profesores inconformes, coincidieron también en estar convencidos de que el Comité Central Ejecutivo del STAUAG, se ha convertido en “Un organismo parásito y subordinado al patrón, que no ha logrado en ocho años una sola conquista laboral, que se sienten abandonados por su sindicato en el tema del ISR y que no atiende las demandas en temas de pensiones y jubilaciones; por lo anterior, insistieron en la necesidad de la creación de un nuevo sindicato académico, pero sobretodo, democrático.
Ofelio Martínez, como trabajador universitario en la categoría "A" tenía un sueldo mensual de alrededor de 34 mil pesos mensuales.
Cabe destacar que al arribar al Comité Ejecutivo Central del STAUAG le aumentan dos categorías más, eso significa que actualmente este líder sindical percibe mensualmente 68 mil pesos, más los nada despreciables viáticos que se autoasigna discrecionalmente, dádivas que ha recibido del gobierno del estado de la pasada administración, como autos de lujo para su uso, privilegios y los altos ingresos lo hacen aferrarse al poder.
A pesar de que Ofelio Martínez públicamente ha reconocido que el estatuto sindical no establece la prórroga del periodo de reelección, no dudo en violarlos y amparándose en que las condiciones sanitarias de septiembre pasado no permitían elegir democráticamente a un nuevo Comité, fue motivo suficiente para que el Consejo General de Representantes prorrogara sus privilegios y canonjias por dos años más.