El representante en Acapulco de la Gromun (Modelo de Naciones Unidas), Yair Seraser García Delgado, dijo que en virtud de que Acapulco es considerada la segunda ciudad más peligrosa del mundo presentó ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero una iniciativa ciudadana que permita identificar los parámetros de medición y de diagnóstico para reconocer las condiciones sociales, políticas, culturales y económicas de esta ciudad.
Para ello se entrevistó con la delegada regional de la CDHEG, Fanny Ruth Lara Figueroa, donde señaló que el antecedente radica en el hecho de que Acapulco y el Estado de Guerrero no cuentan con parámetros de medición, mucho menos diagnósticos que permitan conocer la situación social, política, cultural y económica debido a la falta del involucramiento de la sociedad en temas públicos.
Por ello, consideró que llega el momento en el que los interesados por mejorar el entorno unan esfuerzos para empoderar a la sociedad y formen parte de la resolución de los diferentes problemas. “Combatirlos bajo el estado de derecho y las herramientas democráticas que guardan nuestra Constitución Mexicana y la del Estado de Guerrero”, subrayó.
Consideró que el derecho penal “es un gran aliado para mantener el orden en el municipio, pero ha faltado la parte de la investigación y la sistematización de la información, y estos datos solo pueden obtenerse desde la sociedad, pues con ellos, la criminalistica permite ordenar los tipos de homicidios que hay, por qué suceden, dónde suceden más a menudo, la morfología del posible criminal, cada cuándo suceden, entre otros elementos”.
Y esos datos, abundó, permiten conocer la conducta de un posible criminal y de esa manera orienta a las autoridades del orden público a definir estrategias específicas de seguridad. “De ahí la importancia de crear ciudadanía y abrir espacios de discusión sobre las normas, acciones y leyes encaminadas a recuperar la tranquilidad de nuestro puerto y mantener la paz”, subrayó García Delgado.
Para ello se entrevistó con la delegada regional de la CDHEG, Fanny Ruth Lara Figueroa, donde señaló que el antecedente radica en el hecho de que Acapulco y el Estado de Guerrero no cuentan con parámetros de medición, mucho menos diagnósticos que permitan conocer la situación social, política, cultural y económica debido a la falta del involucramiento de la sociedad en temas públicos.
Por ello, consideró que llega el momento en el que los interesados por mejorar el entorno unan esfuerzos para empoderar a la sociedad y formen parte de la resolución de los diferentes problemas. “Combatirlos bajo el estado de derecho y las herramientas democráticas que guardan nuestra Constitución Mexicana y la del Estado de Guerrero”, subrayó.
Consideró que el derecho penal “es un gran aliado para mantener el orden en el municipio, pero ha faltado la parte de la investigación y la sistematización de la información, y estos datos solo pueden obtenerse desde la sociedad, pues con ellos, la criminalistica permite ordenar los tipos de homicidios que hay, por qué suceden, dónde suceden más a menudo, la morfología del posible criminal, cada cuándo suceden, entre otros elementos”.
Y esos datos, abundó, permiten conocer la conducta de un posible criminal y de esa manera orienta a las autoridades del orden público a definir estrategias específicas de seguridad. “De ahí la importancia de crear ciudadanía y abrir espacios de discusión sobre las normas, acciones y leyes encaminadas a recuperar la tranquilidad de nuestro puerto y mantener la paz”, subrayó García Delgado.