El secretario del Trabajo en Guerrero, Oscar Rangel Miravete, informó que ayer por la tarde fueron reabiertas las cuatro tiendas de cadenas comerciales de Chilpancingo que bajaron cortinas por el paro de trabajadores que exigen el pago de utilidades, luego de dialogar con los inconformes y representantes de los corporativos empresariales respectivos.
Agregó que siguen pendientes los casos de siete tiendas en Taxco, Tixtla, Tierra Caliente y Acapulco, donde hasta las nueve de la noche continuaban las negociaciones con funcionarios menores, pero no llegaban a ningún acuerdo y se quejaron los trabajadores de haber recibido amenazas de despido por parte de los mismos enviados de la Secretaría de Trabajo.
“Fue una mala comunicación de la empresa, el reparto de utilidades aparentemente fue correcto pero no les dieron un bono que tradicionalmente les daban, porque dieron uno en marzo y decidieron no dar éste, sin comunicarlo a los trabajadores”, expuso Rangel Miravete.
En la tienda de la avenida costera Miguel Alemán Valdés, los trabajadores recibieron a dos funcionarios menores de la dependencia, a quienes les indicaron que a ellos no les pagaron ningún bono y de utilidades les dieron cantidades irrisorias.
Afirmaron que en Chilpancingo abrieron “porque los amenazaron con una contrademanda, se ve claramente que estos funcionarios están a favor de la empresa, entonces optamos por retirarnos y regresar mañana pero para hablar con el corporativo y con el secretario, entonces fue cuando nos dijeron que si nos retiramos nos iban a demandar por abandono de empleo, en lugar de apoyarnos”, dijo uno de los inconformes que pidió omitir su nombre para no recibir represalias.
Sostuvo que si se firma algún convenio tendrá que ser hasta este martes, por lo que hicieron un llamado al gobernador del estado, Héctor Astudillo Flores, para que no permita los despidan y por el contrario que los respalden a fin de obtener mejores salarios y prestaciones de ley.