Porque calculan un desfalco de casi medio millón de pesos, empleados del Hospital General Donato G. Alarcón piden a la Secretaría de Salud que audite la caja de ingresos de dicho nosocomio, y que investiguen al director y a la delegada sindical, Juan Carlos Hernández Luna y Raquel Estrada Villaseñor, respectivamente.
Se quejaron también de que no les pagan estímulos económicos anuales por asistencia perfecta, que representan siete mil pesos, “a pesar de que me envió el propio jefe de Recursos Humanos a Chilpancingo, para gestionar el pago respectivo, me bloqueó Ariel Terrazas Téllez, uno de los directivos coludido con Raquel Fabiola Estrada”, indicó Javier Castrejón Martínez.
Agregó que dicho funcionario “filtra mucha información, por ejemplo yo fui a gestionar mi estímulo anual de asistencia perfecta y en cinco minutos le pasó la información a Raquel Estrada, confrontándome con la gente, y con el mismo personal de la institución”.
Joel Hernández Gómez, otro de los empleados inconformes en ese nosocomio ubicado en Renacimiento, quien reclama su plaza “que debió salir desde el tres de abril de 2010, pero me han bloqueado”, apuntó que las filtraciones de Terrazas Téllez “son graves porque no solamente le da información a Raquel, sino a mucha gente, y luego los médicos andan recibiendo llamadas telefónicas de extorsión y amenazas, cuando todos esos datos personales los tiene Ariel Terrazas”.
Dijo que los directivos del hospital, junto con la delegada Raquel Estrada, tienen bajo control a todo el personal con un clima de hostigamiento y amenazas, que han hecho efectivas despidiendo 15 trabajadores en las últimas semanas, “bajo chantajes y fabricándoles expedientes”.