Consignó Transportes a 300 taxistas "piratas" en lo que va de del año

Arturo Parra Ochoa
Acapulco, Gro., 17 de febrero de 2009.- En lo que va del año, 300 taxistas “piratas” han sido consignados por la delegación de Transportes en Acapulco, ante el Ministerio Público del fuero común, como resultado de los operativos que se realizan de una a dos veces por semana de manera sorpresiva, de los cuales 70 por ciento ha sido puesto en libertad, al pagar fianzas de 12 mil a 35 mil pesos en los juzgados penales.
Así lo informó el titular de la delegación, Jesús Rendón Barrientos, quien precisó que la mayoría de estos taxistas “piratas” utilizan los colores oficiales azul con blanco y rojo con blanco, que prestan servicio en las zonas urbana y suburbana, respectivamente, cuyos conductores son remitidos de manera inmediata a la representación social, por el delito de ataques a las vías de comunicación, en su modalidad de pirataje, según el nuevo Código Penal del Estado.
Consideró el funcionario estatal que los operativos, que realizan uno o dos por semana, en distintos puntos de la ciudad de manera sorpresiva, han logrado inhibir la actividad irregular de estos transportistas que carecen de documentos oficiales para prestar el servicio público, y agregó que no hay alguna organización determinada que los proteja, sino que han sido sorprendidos trabajando de manera independiente.
Explicó que en estas acciones interviene solamente personal de las dos delegaciones de Transportes en Acapulco, así como elementos de la Dirección de Tránsito del Estado, para evitar que los “piratas” sean avisados por agentes de otras dependencias.
De acuerdo con el Código Penal de Guerrero, en su capítulo I referente a ataques a las vías de comunicación y a los medios de transporte, en su artículo 204 BIS, al propietario o conductor de un vehículo que preste el servicio público de transporte sin la concesión, permiso o autorización correspondiente, se le impondrá una pena de seis meses a tres años de prisión, y hasta 500 días de multa económica, según la adición efectuada el 21 de enero de 2003.
Cuando los “piratas” son puestos a disposición del Ministerio Público del fuero común, los mantienen dos días en los separos de la Policía Investigadora Ministerial del estado, y de ahí los consignan al juez penal, siendo recluidos en el Cereso durante otros tres días, pero algunos logran salir pagando su fianza, que se les dicta entre 12 mil y 35 mil pesos, comentó Rendón Barrientos.
“Y como ellos mismos se cuentan lo que tienen que pasar por andar “pirateando”, pues ya la piensan mucho y eso ha logrado inhibir las prácticas ilegales con el servicio del transporte público””, enfatizó el delegado en la zona urbana.