Arturo Parra Ochoa
Acapulco, Gro., 10 de octubre de 2008.- Regidoras del Ayuntamiento de Acapulco se niegan a que regresen los ex propietarios que habían solicitado licencia por tiempo indefinido para buscar una diputación local, y advierten que solicitarán el apoyo de sus partidos, así como del Cabildo y del Congreso del Estado, ya que por lo menos siete ediles que perdieron en los recientes comicios pretenden su reincorporación.
Flor Angel Bautista Pérez y María Normeli Donjuán Velarde, quienes eran regidoras suplentes y asumieron la titularidad el pasado 20 de agosto, dijeron haber escuchado que los regidores con licencia Efraín Dorantes Vélez y Oscar Hernández Salgado, del PRI; Octavio Olea Apátiga, Armando Tapia Moreno y Roxana Agraz Ulloa, de Convergencia; Ricarda Robles Urioste, del PRD; y Luis Edgardo Palacios Díaz, del PVEM, ya tramitan su reingreso al Cabildo luego de transcurrido el proceso local electoral en el que no vieron coronadas sus aspiraciones.
Otra que al parecer solicitó su reincorporación es Jovita Gómez Morales, quien perdió la elección para diputada local por el Distrito 18, representando al Partido de la Revolución Democrática, sólo que por ella nunca asumió el cargo su suplente, Raquel Lucero Sánchez, y por consiguiente no ha encontrado ninguna oposición para regresar.
El siete de agosto, asumió la regiduría como propietaria Adriana Selene López Bello, en sustitución de Ricarda Robles Urioste, el mismo día que lo hizo el ahora síndico Anselmo Enrique Torre Salinas, quien entró por María Antonieta Gómez Visairo, luego, el día 20 de ese mismo mes, protestaron como regidores cinco mujeres y dos hombres que eran suplentes.
Además de Flor Bautista (PRI) y Normeli Donjuan (Convergencia), asumieron la titularidad Francia Cristina Ramírez Estrada, del PRD, quien sustituyó a Roxana Agraz Ulloa, de Convergencia; Concepción Taquillo Pérez por Armando Tapia Moreno, también del Partido Convergencia; Miguel Albarrán Mejía por Oscar Hernández Salgado, los dos del PRI; Alma Santa Escamilla Leyva por Margarita Nava Muñoz, igualmente priístas; y Alan Ramírez Hernández por Luis Edgardo Palacios, del Partido Verde Ecologista.
Los regidores que se fueron a competir por una diputación local, cobraron aproximadamente 110 mil pesos correspondientes a las gestiones del mes de agosto, a pesar de que ya no los ejercieron, y recibieron de sus partidos unos 580 mil pesos para gastos de campaña, como parte de las prerrogativas otorgadas por las autoridades electorales para el reciente proceso electoral.
Ahora quieren volver para cobrar aguinaldo y un bono de fin de trienio, lo cual consideran quienes ya funcionan como regidoras, que es injusto e indebido porque sus licencias fueron indefinidas “y debieron haber sido definitivas”, señalan.
Flor Angel Bautista Pérez y María Normeli Donjuán Velarde, quienes eran regidoras suplentes y asumieron la titularidad el pasado 20 de agosto, dijeron haber escuchado que los regidores con licencia Efraín Dorantes Vélez y Oscar Hernández Salgado, del PRI; Octavio Olea Apátiga, Armando Tapia Moreno y Roxana Agraz Ulloa, de Convergencia; Ricarda Robles Urioste, del PRD; y Luis Edgardo Palacios Díaz, del PVEM, ya tramitan su reingreso al Cabildo luego de transcurrido el proceso local electoral en el que no vieron coronadas sus aspiraciones.
Otra que al parecer solicitó su reincorporación es Jovita Gómez Morales, quien perdió la elección para diputada local por el Distrito 18, representando al Partido de la Revolución Democrática, sólo que por ella nunca asumió el cargo su suplente, Raquel Lucero Sánchez, y por consiguiente no ha encontrado ninguna oposición para regresar.
El siete de agosto, asumió la regiduría como propietaria Adriana Selene López Bello, en sustitución de Ricarda Robles Urioste, el mismo día que lo hizo el ahora síndico Anselmo Enrique Torre Salinas, quien entró por María Antonieta Gómez Visairo, luego, el día 20 de ese mismo mes, protestaron como regidores cinco mujeres y dos hombres que eran suplentes.
Además de Flor Bautista (PRI) y Normeli Donjuan (Convergencia), asumieron la titularidad Francia Cristina Ramírez Estrada, del PRD, quien sustituyó a Roxana Agraz Ulloa, de Convergencia; Concepción Taquillo Pérez por Armando Tapia Moreno, también del Partido Convergencia; Miguel Albarrán Mejía por Oscar Hernández Salgado, los dos del PRI; Alma Santa Escamilla Leyva por Margarita Nava Muñoz, igualmente priístas; y Alan Ramírez Hernández por Luis Edgardo Palacios, del Partido Verde Ecologista.
Los regidores que se fueron a competir por una diputación local, cobraron aproximadamente 110 mil pesos correspondientes a las gestiones del mes de agosto, a pesar de que ya no los ejercieron, y recibieron de sus partidos unos 580 mil pesos para gastos de campaña, como parte de las prerrogativas otorgadas por las autoridades electorales para el reciente proceso electoral.
Ahora quieren volver para cobrar aguinaldo y un bono de fin de trienio, lo cual consideran quienes ya funcionan como regidoras, que es injusto e indebido porque sus licencias fueron indefinidas “y debieron haber sido definitivas”, señalan.