Investigación seria, reclaman periodistas sobre la muerte del corresponsal Amado Ramírez


Arturo Parra Ochoa
Acapulco, Gro., 6 de abril de 2008.- Periodistas, familiares y amigos de Amado Ramírez Dillanes, quien fuera corresponsal de Televisa en Acapulco y que fue asesinado hace un año en pleno centro de este destino turístico, refrendaron su demanda de justicia y profundización en las investigaciones del caso.
Dos misas se oficiaron ayer en la Catedral de Nuestra Señora de la Soledad en memoria de Ramírez Dillanes, una por la mañana convocada por la Comisión de Periodistas para el Seguimiento del Caso Amado Ramírez, y la otra en la tarde por los mismos familiares del infortunado corresponsal.
Así también, un grupo de periodistas protestó marchando del zócalo hacia el monumento a Juan R. Escudero ubicado en la playa Tlacopanocha, con una gran manta que reclamaba “Justicia”, concentrándose en la plazoleta ubicada frente al edificio de la CROM, donde los integrantes de la comisión antes mencionada expresaron su postura.
Los familiares más cercanos de Amado, por su lado, abordaron en silencio una lancha para ir a depositar una ofrenda floral en alta mar, en memoria de su ser querido, por quien elevaron una plegaria al cielo, para que descanse en paz.
Roberto Ramírez, Ignacio Hernández, Maribel Helguera, Carlos Ortiz, Mónica Martínez y José Antonio Sánchez, miembros de la Comisión para el Seguimiento del Caso Amado Ramírez, exigieron al gobierno del estado el cabal cumplimiento de la recomendación emitida por la Comisión Nacional de Derechos Humanos, donde se señala que no han sido agotadas todas las líneas de investigación en torno a este homicidio.
Demandaron que el procurador de Justicia del estado, Eduardo Murueta Urrutia, informe públicamente sobre cuál es la situación que guarda el expediente que actualmente se ventila en el juzgado penal correspondiente, y adopte al posicionamiento oficial de la dependencia a su cargo en torno a los supuestos actos violatorios cometidos durante todo el procedimiento de la investigación, para dar con el o los responsables del crimen del periodista.
“Esta Comisión, integrada por periodistas que fueron elegidos por los propios periodistas de Acapulco, no aboga ni por las autoridades en el estado en el estado responsables de esclarecer los hechos que provocaron el reprobable asesinato de nuestro compañero, ni tampoco por los presuntos responsables, materiales e intelectuales, que las mismas autoridades presenten”, cita una postura entregada por escrito.
Y añade: “Manifestamos nuestra preocupación como gremio porque, en base a los elementos que están a la vista de todos, a un año del asesinato de Amado Ramírez Dillanes la investigación no está resuelta. Aunque sabemos que existe una persona detenida, también conocemos de las múltiples tropelías y aberraciones de investigadores que se cometieron durante el procedimiento de las pesquisas, por lo que, insistimos no queremos chivos expiatorios, ni mucho menos impunidad.”