Debe abrirse un debate público para discutir la legalización del aborto: padre Gonzalo Miranda

Arturo Parra Ochoa
Acapulco, Gro., 8 de abril de 2008.- El decano profesor de la Facultad de Bioética del Ateneo Pontificio de Roma, padre Gonzalo Miranda, propuso abrir un debate público a nivel estatal y nacional, para discutir la legalización del aborto, pues argumenta que “solamente unos cuantos, desde los congresos, quieren determinar lo que la mayoría de la gente desea”, y aseguró que las estadísticas sobre abortos clandestinos han sido “hinchadas” para poder sustentar la pretendida legalización.
Dijo que el tema se abordará durante los días 10 y 11 de abril, en el Congreso Internacional de Bioética a celebrarse en este puerto, con el título “La eutanasia y el aborto: retos y desafíos en México”, anuncio que hizo durante una conferencia de prensa ofrecida ayer en las instalaciones del Seminario del Buen Pastor, donde estuvieron el rector de la misma, presbítero Adolfo Silva Pita, el sacerdote Raúl Cabrera y otros.
Miranda insistió en que el aborto no es un tema agotado “y estamos a tiempo de levantar la voz por aquellos que no pueden hacerlo, los que no pueden decir nada, los niños que no tienen culpa de nada, y a los que hay que defender y proteger porque se quiere cometer una grave injusticia en su contra; el aborto es un crimen y aquí se quiere legalizar el homicidio”.
Señaló que en México no se ha querido abrir un debate público nacional, “porque esa pretensión de legalizar el aborto no responde a la sensibilización y cultura del pueblo mexicano, que es un pueblo abierto a la vida, que ama la vida, de ahí que la tendencia es hacerlo de manera local en algunos estados, creando precedentes para los demás sin que se convoque a un debate serio”.
El profesor de bioética del Ateneo Pontificio “Regina Apostolorum” de Roma, Italia, quien dictará las conferencias magistrales “¿Voluntad anticipada o eutanasia?” y “Límites de la intervención médica al final de la vida humana”, durante el Congreso Internacional de Bioética, en el hotel Elcano, apuntó que las cifras para sustentar la pretendida legalización del aborto “son incontrolables y no identificables, como si hubieran usado una varita mágica para crearlas y tratar de impactar en la opinión pública. Se hinchan y falsifican las estadísticas sobre el número de mujeres que abortan en la clandestinidad”.
Luego indicó que donde se ha legalizado, “a las mujeres que se quedan con el trauma post aborto nadie las asiste, las dejan con terribles efectos emocionales y psicológicos para toda su vida, mientras otros inocentes se quedan con el síndrome del sobreviviente, o sea los hermanos, y todas esas son heridas tremendas que nadie cura, la ley abandona a esas mujeres y niños”.
Así mismo subrayó que una vez legalizado el aborto no se respetan las condiciones señaladas en las normas legales, pues llegan a practicarse abortos fuera de los períodos establecidos por la ley, “y no se ha resuelto el problema de los abortos clandestinos, que continúan por muchas otras causas, como la económica, la vergüenza, la falta de empleo, el temor de que alguien se entere, y hasta llegan a incrementarse las prácticas abortivas”.
La mayoría de esas mujeres lo que necesita “no es solamente ayuda médica y psicológica, sino ayuda económica, ver las condiciones en que viven y donde se crea esa mentalidad, no tienen dinero ni empleo, ellas ni el esposo, y no se les ayuda económicamente, no se resuelven esos problemas de origen”, continuó el padre Gonzalo Miranda.
Y aclaró que “la Iglesia Católica no pretende ser legisladora, solo invita a la reflexión, mientras que algunos hablan de modelos modernistas que solamente copian de otros países, donde ya están pensando cómo atender las consecuencias, y se preguntan si habrán hecho lo correcto, porque los abortos clandestinos no terminan”.