Arturo Parra Ochoa
Acapulco, Gro., 25 de febrero de 2007.- El obispo auxiliar de Acapulco, Juan Navarro Castellanos, señaló que todos los acapulqueños están inquietos y preocupados ante la violencia, rogando porque ésta se supere. “El mal se supera con el bien, pero desde luego las leyes son importantes, y esperamos que con los operativos que se están implementando sean superados todos los hechos de violencia”, expresó.
Por otro lado, dijo que se analizan con detenimiento las reformas aprobadas la semana pasada por los senadores, que contemplan sanciones contra ministros de culto que abusen de menores de edad, a la vez que vislumbran inhabilitarlos, porque al parecer hay alguna controversia entre la legislación civil y la religiosa.
Sobre el caso de la presa La Parota, dijo que debe hacérsele justicia a todas las partes que intervienen. “Es muy digna de respeto la postura de las partes, para algunos hay ventajas y otros tienen miedo, sabemos que es un proyecto grande y que por lo tanto de hacerse tendría muchas consecuencias, e implicaría a muchas personas, lo cual no es fácil de juzgar; al respecto, respetamos las opiniones de unos y de otros, sólo esperamos que la decisión que se tome la respeten todos y se haga justicia a todos”.
El representante de la Iglesia Católica consideró importantes y necesarios los operativos contra la delincuencia organizada, “es importante la vigilancia policíaca, pero es importante también cambiar la cultura, cambiar las conciencias. El mensaje de la Cuaresma es que tenemos que cambiar los corazones, para luego cambiar las estructuras de la sociedad”, puntualizó.
Acerca de la nueva legislación que protege a los menores de edad con penas más severas para quienes abusen de ellos, observó que “son leyes que buscan proteger a las personas, sobre todo a los menores, a los más desamparados, a las mujeres, a los hijos de los mismos padres; son leyes que buscan proteger a la gente que busca el bien”.
El Senado aprobó recientemente un dictamen para reformar los códigos Penal Federal, de Procedimientos Penales y la Ley Federal Contra la Delincuencia Organizada, contemplando sanciones severas contra los sacerdotes que corrompan o abusen de menores de 18 años de edad, con la posibilidad de impedirles indefinidamente el ejercicio de su culto religioso.
Cuando se le inquirió sobre el tema, Juan Navarro externó: “Por la información que tengo, hay una controversia entre dos leyes, las tienen que analizar bien los legisladores, tienen que profundizar los expertos en esas cuestiones, porque una cosa es la comisión de un delito y que civilmente es castigado, y otra cosa es la inhabilitación a un ministro de culto, porque son casos diferentes, habría que analizar la ley, y en su oportunidad se harán las orientaciones y las correcciones adecuadas”.
Y añadió: “En la ley está estipulado que hay un Reglamento de Asociaciones Religiosas, y que contempla que son las iglesias las que en un momento determinado pueden inhabilitar a un ministro de culto. Otra cosa es que se aplique la ley civil, a un delito cualquiera, sea delito sexual o cualquiera otro. Ahí hay una controversia y en su tiempo se buscará aclararlo”.
Acapulco, Gro., 25 de febrero de 2007.- El obispo auxiliar de Acapulco, Juan Navarro Castellanos, señaló que todos los acapulqueños están inquietos y preocupados ante la violencia, rogando porque ésta se supere. “El mal se supera con el bien, pero desde luego las leyes son importantes, y esperamos que con los operativos que se están implementando sean superados todos los hechos de violencia”, expresó.
Por otro lado, dijo que se analizan con detenimiento las reformas aprobadas la semana pasada por los senadores, que contemplan sanciones contra ministros de culto que abusen de menores de edad, a la vez que vislumbran inhabilitarlos, porque al parecer hay alguna controversia entre la legislación civil y la religiosa.
Sobre el caso de la presa La Parota, dijo que debe hacérsele justicia a todas las partes que intervienen. “Es muy digna de respeto la postura de las partes, para algunos hay ventajas y otros tienen miedo, sabemos que es un proyecto grande y que por lo tanto de hacerse tendría muchas consecuencias, e implicaría a muchas personas, lo cual no es fácil de juzgar; al respecto, respetamos las opiniones de unos y de otros, sólo esperamos que la decisión que se tome la respeten todos y se haga justicia a todos”.
El representante de la Iglesia Católica consideró importantes y necesarios los operativos contra la delincuencia organizada, “es importante la vigilancia policíaca, pero es importante también cambiar la cultura, cambiar las conciencias. El mensaje de la Cuaresma es que tenemos que cambiar los corazones, para luego cambiar las estructuras de la sociedad”, puntualizó.
Acerca de la nueva legislación que protege a los menores de edad con penas más severas para quienes abusen de ellos, observó que “son leyes que buscan proteger a las personas, sobre todo a los menores, a los más desamparados, a las mujeres, a los hijos de los mismos padres; son leyes que buscan proteger a la gente que busca el bien”.
El Senado aprobó recientemente un dictamen para reformar los códigos Penal Federal, de Procedimientos Penales y la Ley Federal Contra la Delincuencia Organizada, contemplando sanciones severas contra los sacerdotes que corrompan o abusen de menores de 18 años de edad, con la posibilidad de impedirles indefinidamente el ejercicio de su culto religioso.
Cuando se le inquirió sobre el tema, Juan Navarro externó: “Por la información que tengo, hay una controversia entre dos leyes, las tienen que analizar bien los legisladores, tienen que profundizar los expertos en esas cuestiones, porque una cosa es la comisión de un delito y que civilmente es castigado, y otra cosa es la inhabilitación a un ministro de culto, porque son casos diferentes, habría que analizar la ley, y en su oportunidad se harán las orientaciones y las correcciones adecuadas”.
Y añadió: “En la ley está estipulado que hay un Reglamento de Asociaciones Religiosas, y que contempla que son las iglesias las que en un momento determinado pueden inhabilitar a un ministro de culto. Otra cosa es que se aplique la ley civil, a un delito cualquiera, sea delito sexual o cualquiera otro. Ahí hay una controversia y en su tiempo se buscará aclararlo”.