Arturo Parra Ochoa
Acapulco, Gro., 8 de enero de 2007.- El delegado de la Profeco, Joel Angel Tacuba García, declaró que los molineros socios de la Unión de Industriales de la Masa y las Tortillas de Acapulco, que dirige Arcadio Castro Santos, aparte de asumir prácticas monopólicas al determinar de manera arbitraria un aumento al kilogramo de la tortilla, a 12 pesos, se han negado a ser verificados por los inspectores federales.
Por ese motivo, agregó, ya fueron multados seis de ellos con 15 mil pesos cada uno, además de que a otros dos se les colocaron sellos de advertencia, de un total de 50 que están en proceso de verificación, hasta que vuelvan a dar el precio anterior de 10 pesos por kilogramo de ese producto de primera necesidad.
Por otro lado, en relación con la reciente temporada vacacional, informó que se recibió un total de 44 denuncias de turistas, lo que representa un incremento de casi el 90 por ciento en relación al año pasado, cuando hubo solamente 25. Del total de quejas, 60 por ciento correspondió a hoteles, 20 por ciento a restaurantes y el resto por diversos conceptos, como deportes acuáticos y lanchas con fondo de cristal, además de líneas de transporte que no querían respetar los descuentos ofrecidos.
El funcionario federal precisó que hasta las oficinas de la Procuraduría Federal del Consumidor, se han presentado alrededor de 100 quejas contra industriales de la masa y la tortilla por la alteración de precios, de las cuales ya está en proceso un 50 por ciento.
Precisamente ayer, Tacuba García recibió la visita de Arcadio Castro y otros miembros de su agrupación, quienes omitieron hablar sobre la entrevista que sostuvieron con el delegado federal.
Las negociaciones advertidas tendrán un lapso de 12 días para que bajen el precio a 10 pesos el kilogramo, e impedir que se les infraccione con una multa de 15 mil pesos, además de una posible clausura. La mayoría de estas tortillerías se encuentra en la zona suburbana de Acapulco, como las colonias Renacimiento, Emiliano Zapata, La Venta, Vacacional, Coloso, Colosio y La Sabana.
“Tenemos dos establecimientos con sellos de advertencia y el resto en procedimiento, pero hay que comentar que algunas de las tortillerías dieron marcha atrás, porque bajaron sus precios al establecido anteriormente, de 10 pesos por kilogramo, derivado de los operativos que se estamos realizando”, puntualizó el representante de la Profeco.
Luego indicó que no puede incrementarse de manera desproporcionada el precio de uno de los principales artículos de la canasta básica, pues las condiciones económicas de la gente no son las adecuadas luego de que se dio a conocer el aumento a los salarios mínimos, que resultó insuficiente para hacerle frente a las necesidades primarias de las familias guerrerenses.
Acapulco, Gro., 8 de enero de 2007.- El delegado de la Profeco, Joel Angel Tacuba García, declaró que los molineros socios de la Unión de Industriales de la Masa y las Tortillas de Acapulco, que dirige Arcadio Castro Santos, aparte de asumir prácticas monopólicas al determinar de manera arbitraria un aumento al kilogramo de la tortilla, a 12 pesos, se han negado a ser verificados por los inspectores federales.
Por ese motivo, agregó, ya fueron multados seis de ellos con 15 mil pesos cada uno, además de que a otros dos se les colocaron sellos de advertencia, de un total de 50 que están en proceso de verificación, hasta que vuelvan a dar el precio anterior de 10 pesos por kilogramo de ese producto de primera necesidad.
Por otro lado, en relación con la reciente temporada vacacional, informó que se recibió un total de 44 denuncias de turistas, lo que representa un incremento de casi el 90 por ciento en relación al año pasado, cuando hubo solamente 25. Del total de quejas, 60 por ciento correspondió a hoteles, 20 por ciento a restaurantes y el resto por diversos conceptos, como deportes acuáticos y lanchas con fondo de cristal, además de líneas de transporte que no querían respetar los descuentos ofrecidos.
El funcionario federal precisó que hasta las oficinas de la Procuraduría Federal del Consumidor, se han presentado alrededor de 100 quejas contra industriales de la masa y la tortilla por la alteración de precios, de las cuales ya está en proceso un 50 por ciento.
Precisamente ayer, Tacuba García recibió la visita de Arcadio Castro y otros miembros de su agrupación, quienes omitieron hablar sobre la entrevista que sostuvieron con el delegado federal.
Las negociaciones advertidas tendrán un lapso de 12 días para que bajen el precio a 10 pesos el kilogramo, e impedir que se les infraccione con una multa de 15 mil pesos, además de una posible clausura. La mayoría de estas tortillerías se encuentra en la zona suburbana de Acapulco, como las colonias Renacimiento, Emiliano Zapata, La Venta, Vacacional, Coloso, Colosio y La Sabana.
“Tenemos dos establecimientos con sellos de advertencia y el resto en procedimiento, pero hay que comentar que algunas de las tortillerías dieron marcha atrás, porque bajaron sus precios al establecido anteriormente, de 10 pesos por kilogramo, derivado de los operativos que se estamos realizando”, puntualizó el representante de la Profeco.
Luego indicó que no puede incrementarse de manera desproporcionada el precio de uno de los principales artículos de la canasta básica, pues las condiciones económicas de la gente no son las adecuadas luego de que se dio a conocer el aumento a los salarios mínimos, que resultó insuficiente para hacerle frente a las necesidades primarias de las familias guerrerenses.